Sorpresa y de las gordas, la selección más blaugrana de la historia tropezó con Suiza, la verdad es que La Roja ya se puede mentalizar a que todos los equipos le jueguen como Suiza, la táctica cobarde de encerrarse con todo y esperar a que suene la flauta, es lo mismo que le pasa al Barça, si no se abre la lata pronto las cosas se complican, la ansiedad aparece y si encima el rival tiene suerte pues pasa lo que pasa, aunque algunos defienden este tipo de fútbol porque muchas veces se consiguen grandes resultados a mí me sigue pareciendo antifútbol, es cierto que se pueden ganar títulos jugando así, pero quién se acordará de la Italia campeona del mundo, la eurocampeona Grecia o el propio Inter... yo desde luego no.Espero que España siga jugando así, que no pierda este estilo y no salga tensionado, creo sinceramente que este puede ser el Mundial de La Roja pero no se ganará con la gorra.
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